Este frío sábado, el clima se hizo notar en las gradas con una asistencia poco habitual de los derbi. Desde el inicio, el Ponent mostró mayor precisión y se llevó una leve ventaja en un primer tiempo muy parejo. El equipo local logró un ensayo, una transformación y un penal a palos, mientras que la visita, Shamrock, aprovechó cada infracción rival para descontar con penales a palos.
En la segunda mitad, aunque los delanteros del Ponent se mantuvieron firmes y dominaron las melés, Shamrock salió con otra actitud. Se adueñó del juego y fue un auténtico aluvión ofensivo. La férrea defensa del Ponent terminó pagando caro el desgaste y cometió dos infracciones que le costaron tarjetas amarillas. La superioridad numérica fue bien aprovechada por la visita, que logró marcar la diferencia en el tanteador.
Sin embargo, en los minutos finales, con su equipo completo nuevamente, el Ponent reaccionó. Apretó al rival, achicó la diferencia y empujó hasta el último momento, aunque el esfuerzo no fue suficiente para revertir el marcador de 20 a 26.
En definitiva, un tiempo para cada equipo, un derbi repartido y una rivalidad que sigue más viva que nunca.