La colegiada de las Illes Balears hace historia arbitrando su décima temporada consecutiva en competición europea. Souto ejercerá como árbitra principal del partido entre el Sporting de Lisboa y el Vandoeuvre Nancy este miércoles a las 20:30 horas.
La árbitra balear vuelve a ponerse el equipaje europeo. Gloria Souto embarca el silbato al avión, de nuevo, con destino al viejo continente para arbitrar, por décima temporada consecutiva en competición europea. La colegiada lleva desde la temporada 2015/16 pitando en los mejores pabellones de Europa y este curso cumple su décima campaña al pie del cañón con un debut que realizará este miércoles en Lisboa entre el Sporting y el Vandoeuvre Nancy francés correspondiente a los dieciseisavos de final de la Volleyball Cup. Con una carrera nacional e internacional envidiable, Gloria Souto es, sin duda, la referente en el arbitraje balear abriendo el camino a todos los que, año a año, se van formando y progresando en este mundo.
La árbitra balear celebra una década representando el voleibol balear en las mejores pistas de Europa, es por ello por lo que asegura que “para mí es todo un orgullo y al mismo tiempo una gran responsabilidad que asumo con gran entusiasmo y horas de preparación”. Y es que el trabajo y la constancia son dos factores que caracterizan a Souto y justifican su gran posición en el mundo del arbitraje del voleibol, aunque ella lo asume con humildad y agradecimiento: “No me considero una, referente sino una afortunada y una persona agradecida a las oportunidades que se me han brindado”. La colegiada isleña cree que las claves para alcanzar las metas son “paciencia, esfuerzo y respeto” y anima a todos los árbitros baleares a seguir trabajando, ya que, afirma, “hay compañeros con mucha proyección”.

Gloria Souto debuta esta temporada en el encuentro entre el Sporting de Lisboa portugués y el Vandoeuvre Nancy francés, un partido del que dice que “no he tenido la ocasión de coincidir anteriormente con estos dos grandísimos equipos y tampoco creo que mi preparación sea muy distinta a la del resto de compañeros: analizar partidos anteriores, compartir experiencias con compañeros que ya han arbitrado a estos equipos, etc”. El encuentro es correspondiente a los dieciseisavos de final de la CEV Volleyball Cup, la segunda competición europea. Un escalón por encima está la Champions League, la máxima competición continental y en la que todos quieren estar, aunque Souto asume que es difícil dar el salto de categoría: “No es cosa sencilla ya que el nivel de los compañeros es extraordinario, así como el de los compañeros que se acaban de incorporar a competición europea” y añade que “las exigencias son máximas”, aunque conociéndola seguro que va a seguir trabajando y ofreciendo su máximo nivel para lograr todos los objetivos que se marque y seguir representando el arbitraje y el voleibol balear de la mejor manera posible.





