El conjunto dirigido por Marco Justo afronta el primer derbi liguero del curso en un estado de plenitud emocional.
El Palmer Basket se mide al Sant Antoni este sábado a las 19:30 horas. La escuadra mallorquina llega a esta bella cita con el impecable bagaje de nueve triunfos y cero derrotas. El extraordinario inicio de campeonato del bloque palmesano no oculta la gran dificultad de este desafío. El cuadro ibicenco es uno de los candidatos a luchar por toda esta campaña y es un club que atesora jugadores diferenciales en ambos lados de la cancha como Daniel de la Rúa, Gregory Gantt y Josep Peris. Además, el elenco adversario cuenta con un entrenador referencial de la talla de David Barrio, preparador que rozó el ascenso con la entidad la temporada pasada. Las dos victorias seguidas logradas por el rival le hacen todavía más peligroso.
El técnico del equipo, Marco Justo, ha valorado el duelo.
El preparador ha argumentado: “Nos enfrentamos a uno de los mejores equipos de la categoría, por no decir el mejor, en cuanto a plantilla, nombres y proyecto se refiere”. Justo ha incidido: “Todos los rivales nos han exigido, pero evidentemente, el de mañana lo hará mucho más, por el contexto del partido, la emoción es diferente, es un derbi, eso influye siempre”. El entrenador ha destacado: “Ellos han cambiado su dinámica, y ya llevan dos victorias consecutivas, y eso les ha dado más confianza, yo creo que va a ser un partido muy competido”. Justo ha apuntado: “Nuestra idea es seguir haciendo nuestro trabajo, hacerlo lo mejor posible y acabar el encuentro y estar satisfechos con lo que hemos dado”.
Los derbis son especiales, tienen un aroma distinto, bonito y único. La cita de mañana es un nuevo reto para elevar el nivel ofrecido y brindar un espectáculo acorde a lo que se merece el deporte de nuestras islas. En este club, los esfuerzos no se negocian y la actitud debe volver a ser clave para poder soñar con el décimo triunfo.